Este cambio de mes para nosotros fue sumamente importante ya que significó un cambio de hogar en Berlín. Por suerte la gran Ulli nos rescató un par de días para llevarnos a su hogar a 42kms al norte de la ciudad, a Pabstthum para ser específicos. Un campito donde tiene su huerto propio del cual se abastece y hasta intercambia o vende. Todo orgánico. Y para qué decir de sus platos con los que hace los caterings… De verdad impactados de cómo comimos, cosechamos, dormimos y todo el lov entregado 🙂
Te queremos Ulli! (aunque no lo entienda así en español)